Parmigiana

Con la mente puesta en la temida #operaciónbikini {aunque reconozco que sólo a ratos} hoy os traigo uno de mis platos favoritos de la gastronomía italiana; taaan rico y tan sano que me pareció el momento perfecto para proponérosla ;)

¿Nos ponemos el delantal?

* Ingredientes

-1.5 kg de berenjena

-2 latas grandes de tomate triturado (1,5kg)

-150 gramos de parmesano rallado

-2 bolas de mozzarella fresca

-2 dientes de ajo

-1 cebolla

-Albahaca fresca

-1 limón (para evitar la oxidación de la berenjena)

* Preparación 

En primer lugar cortaremos las berenjenas y las pondremos a sudar. Para ello las salamos y las colocamos en un escurridor. De esta forma, pierden el amargor. El grosor más adecuado es entre 0,5 y 1 cm. Las rociamos con un chorrito de limón y las dejamos sudar media hora.

Mientras sudan, picaremos bien finita la cebolla y el ajo y los pondremos a sofreír en una cazuela para hacer la salsa de tomate.

Una vez que se haya pochado y tomado color, añadimos el tomate, un poco de sal, azúcar para corregir la acidez y lo ponemos a reducir a fuego medio alto

Encendemos el horno a 180º con calor solo abajo y cuando hayan sudado lo suficiente las berenjenas, las preparamos para hornear.

Las colocaremos en una bandeja de horno donde previamente habremos puesto un poco de aceite para que no se peguen, añadimos un chorrito más de aceite y las metemos a hornear. En unos 20-25 minutos estarán listas. De todas formas para saber si ya están listas lo mejor es que las pinchéis y si están blanditas, ya está :)

Cuando ya esté la salsa de tomate casi lista {haya reducido a la mitad más o menos} será el momento de añadir la albahaca finamente picada. En 5 minutos más estará lista.

Por último, sacaremos las berenjenas del horno y empezaremos a montar: capa de tomate, capa de berenjenas, capa de tomate y parmesano.

Al poner la última capa, cortaremos las bolas de mozzarella y las repartimos por la superficie. Horneamos a 180-200º hasta que quede gratinado uniforme.

¡Y lissssto!

Ya me contaréis pero, de verdad, os prometo que merece la pena porque está de vicio 

;)